Como distribuidores de jamón de Guijuelo en Salamanca de referencia, queremos aprovechar estas líneas para explicar en qué se diferencian los ejemplares de bellota, recebo y cebo.

Las diferencias entre todos ellos son significativas. De hecho, son las responsables del peculiar sabor del jamón. Si vemos una etiqueta en la que pone ‘jamón de cebo’, es señal de que el cerdo ibérico del que se ha obtenido ha sido alimentado, sobre todo, con cereales y piensos.

Respecto al recebo, hay que señalar que son los jamones elaborados con cerdos que han recibido una alimentación mixta. Esto quiere decir que primero han estado comiendo solamente bellotas (unos 10 kilos diarios) durante el periodo de la montanera y después se les dan piensos especiales procedentes de las leguminosas y los cereales.

Como distribuidores de jamón de Guijuelo en Salamanca con gran experiencia en el sector, queremos que sepas que un jamón de bellota, como bien dice su nombre, ha sido obtenido de un cerdo ibérico que ha sido alimentado solo con bellotas hasta que se sacrifica. Son animales que viven a sus anchas por la dehesa y disfrutan de una alimentación basada en las bellotas.

La diferencia entre estas tres calificaciones se nota bastante en el sabor. Esto repercute, por supuesto, en el precio de cada uno de los jamones.

Desde Jamones Montenuevo, queremos recordarte que si compras un jamón ibérico, no quiere decir que el cerdo haya sido alimentado de forma exclusiva con bellotas y al aire libre. Para que sea así, en la etiqueta, se debe especificar “jamón de bellota”, y no de cebo o recebo.