Es difícil encontrar a alguna persona a la que no le guste el jamón ibérico y en Salamanca puedes disfrutar de auténticas piezas ibéricas si pasas por nuestra tienda. Ofrecemos a nuestros clientes una gran variedad de productos elaborados cuidadosamente tras una rigurosa selección. Y es que, para conseguir un buen jamón es necesario contar con una materia prima de calidad, por supuesto. Pero también es muy importante el proceso de secado.

Una vez que el jamón está salado se coloca en el secadero, donde se expone a una temperatura elevada y a una humedad relativa menor que en la etapa de salado. En esas condiciones se estabiliza el color y el grado de secado de las piezas. También se favorece que se produzcan unas reacciones que son responsables del sabor y del aroma que caracterizan al jamón ibérico.

La variación de la temperatura es muy suave y se produce de forma gradual, entre un grado y medio y dos grados y medio por semana. De este modo se lleva a los 22’5 grados que requiere el secado. Además, se pasa del 80% de la humedad relativa al 65%. Se suele tardar 60 días para superar la diferencia de temperatura entre salazón y secado.

Esta fase de secado culmina a altas temperaturas, con el estufaje. Los jamones llegan a estar a 26’5 grados y las paletas a 33’5 durante tres meses.

Si quieres probar un buen jamón ibérico en Salamanca te aconsejamos que te acerques por nuestra tienda. Además, también tenemos a la venta chorizos y salchichones de gran calidad. No dudes en preguntar por ellos.

En Jamones Montenuevo ofrecemos a nuestros clientes productos ibéricos a buenos precios. Si quieres un suministro regular para tu tienda o para tu restaurante puedes hablar con nuestro equipo comercial sin compromiso.